miércoles, 31 de agosto de 2011

A quien corresponda

Antes que nada, esto me ha tocado de oyente, no soy un anciano de mil años en la escena, ni siquiera conozco la escena y respeto el esfuerzo:

Lo que está a punto de escuchar no es mierda post-rock ambientalista de WITTR o Deafheaven, no es mierda de culto retrógrada: mierda nazi, mierda satánica, MIERDA NACIONALISTA DE MIERDA (en cuanto a sonido, Yaoyotl es un proyecto buenísimo) y así miles de mierdas relacionadas que de cada 1000 bandas una es buena en el black metal (no es que el black metal sea elitista pero sí esta saturado de cosas que a mi parecer apestan). Nattramn tocó los bordes de la locura. Cabe resaltar que la música de Silencer se vuelve un registro sonoro, allí la razón de su sobrevaloración. Esto es, rechazar el simulacro para generar sonidos a partir de la experimentación física. Si bien en estos últimos años, ha habido una fuerte revolución sonora en cuanto a influencias y equipo, por esto, el black metal se ha visto sometido a cambios drásticos tanto ideológicos como estilísticos para volverse universal (¡gracias era de la información!), bandas como Sunn O))), Alle Totmachen!, Brobdingnagian, Wold, Halalnihil etc.. Han difundido una nueva oleada (que desconozco si tendrá ya un nombre) que combina elementos del harsh noise, noise, ambient, drone etc involucrando al oyente en atmósferas oscuras de estados alterados, cosa difícil de encontrar en otros géneros dentro de lo comercial. Y de eso se trata este ejercicio, de la experimentación de estados de consciencia a partir de estímulos provocados para la introspección y concepción individualista. Un cambio inducido en la memoria declarativa del partícipe. En éste caso hago uso del black metal depresivo.

De cualquier forma… póngame usted atención; fanático, músico, blogger: los sonidos no son significativos. Yo le vengo a presentar elocuencia, sobre todo. Que seguidamente se adapta a facilidades de los géneros musicales como un medio de interés egoísta. Y le invito a pasar el rato.

Y luego del regaño introductor para definir algo a partir de lo que no es. Le solicito, si tiene la oportunidad: Enciérrese en el baño esta madrugada. Lleve su reproductor de música con mucha batería (bocinas, si las posee), silla, cigarros, encendedor, almohada, vaso, diario personal, bolígrafo y abanico. Reproduzca éste archivo con la función ‘repitiendo todas las canciones’. Tome agua del lavabo. Mójese la cabeza. Moje su camiseta, exprímala y vuélvasela a poner. Coloque la silla frete al espejo y mírese mucho. Fume los cigarros que quiera. Prenda el abanico en función giratoria. Siéntese muy cómodo. Apague la luz. Encuentre formas. Registre en su diario (opcional). Escuche la música. Duerma en donde quepa.



Dead (Mex) – Hanging Illusions (2009)
http://www.mediafire.com/?ad3p67a4qbm9lmb

lunes, 29 de agosto de 2011

(a la extrañeza de individualidad transitoria)


Luego de la primera noche sin dormir todo resulta una escapatoria.

domingo, 28 de agosto de 2011

DESGANADO


En respuesta a la consuetudinaria y purgativa cuestión
¿No tengo sexo porque soy sentimental, o viceversa?

La dicotomía está hecha.
Algo de cariño hay en lo carnal. (Y mira que no me quejo del carniforme de tu amor.)
Incluso, preferiría no jugármela con recovecos sabiendo que hay una chispa, que por más mínima que sea, pueda generar una conexión anímica alternada.
Entiendo las características y ofrecimientos del muestreo y sus congéneres sensibles:

Puesto el sudor de tu cuerpo en la memoria dérmica del adiós. El más dulce abrigo.
En las integraciones efímeras de aliento sincronizado, la estancia hogareña de otredad envolvente.
Mil veces tocaría tu puerta en la amalgama
¿Pero cuántos recuerdos quemaríamos a la distancia soñarrera, para mudarnos a un amor imperecedero?